Innovar para crecer: la oportunidad del turismo cubano en una nueva normalidad

PUBLICADO POR Ministerio de Turismo de Cuba EN Noticias EN diciembre 6, 2021

Jeniffer Rodríguez Martinto, ACN

La pandemia de la COVID-19 ha provocado un descenso de los flujos turísticos en el mundo, retrayéndolos a alrededor de 20 años. Según los pronósticos, la recuperación va a ser asimétrica y solo se obtendrán los mismos resultados globales del 2019 en 2023 o 2024.

A decir del Doctor en Ciencias de II grado Ramón Pomés Hernández, quien se encuentra al frente del Programa Sectorial de Ciencia, Técnica e Innovación del Turismo en Cuba, este proceso será desigual por regiones, por países, e incluso por polos turísticos.

De acuerdo con el también profesor e investigador titular, actualmente la innovación se ha convertido en el eje central del desarrollo del ramo, no solo en la nación caribeña, sino en el mundo.

El turismo es la adquisición de experiencias y estas son más atractivas si tienen ese componente, comentó.

La innovación, insistió el especialista, es importante en todas las facetas del proceso, desde la promoción del destino y de sus hoteles, y eso ocurre mucho antes de que los visitantes lleguen al país.

“Actualmente el turista quiere, desde que entra a la instalación, tener la posibilidad de conocer desde su dispositivo móvil lo que pudiera disfrutar u obtener, reservar y pagar por productos y servicios”.

Hoy, la Isla tiene que ser innovadora por obligación, acotó Pomés Hernández, porque es la manera en que podrá retornar a los niveles anteriores a la pandemia.

En la medida en que los destinos del país sean capaces de avanzar más en este sentido, de ser más inteligentes, de satisfacer mejor las expectativas de los turistas, va a existir una recuperación más rápida, afirmó.

Cuba tiene un grupo de características que le son favorables para este proceso como el potencial de trabajadores calificados y con nivel de especialización, la fuerte vinculación con universidades, la existencia de una escuela ramal, y de centros de capacitación en todas las provincias.

Hemos pasado casi dos años confinados y ahora existe una tendencia a que el turismo se desarrolle más en espacios abiertos, y ahí también hay innovación, porque debemos lograr que nuestros destinos sean más sustentables y sostenibles.

La innovación: ¿Tema nuevo para el turismo cubano?

El turismo cubano se ha caracterizado en los últimos años por ser innovador, pero ante la contingencia de la COVID-19, las autoridades han comprendido la necesidad de que la innovación, la ciencia y la técnica sean capaces de acelerar, de acompañar, de impulsar, de dirigir el proceso de recuperación.

En julio de 2021, explicó, se aprobó el desarrollo del Programa Sectorial del Turismo y hasta el momento se han presentado 32 proyectos y existe una amplia participación en ellos de entidades del ramo y de la educación superior, así como de centros de investigaciones.

Este programa, primero de su tipo en el sector, fue aprobado por el Ministerio de Turismo, de común acuerdo con el de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, y se concibió para que tuviera una duración de cinco años.

Proyecciones innovadoras: la apuesta por un turismo más moderno, sostenible y atractivo

   De acuerdo con Pomés Hernández, se encuentran trabajando en un proyecto para la protección de la biodiversidad y mitigación del cambio climático, el cual se lleva a cabo fundamentalmente en los polos de Varadero y Cayo Coco.

El objetivo es proteger la biodiversidad de esos destinos, que el ambiente marítimo y terrestre se vea cada vez más protegido y mitigar los efectos del cambio climático.

Hay una tendencia en el mundo a alcanzar hoteles carbono free, es decir, que no emitan gases contaminantes, y ya se ha logrado en la mayoría de las instalaciones del país eliminar los flurocarbonatos, que son dañinos para la capa de ozono.

Otro proyecto está vinculado a la eficiencia energética y al uso de las fuentes renovables de energía, lo cual es también muy interesante para el turista; y se encuentran realizando, paralelamente, investigaciones sobre la competitividad.

“La competitividad no es un eslogan, ni es cualitativa, tiene métricas, y formas en que se mide y estamos trabajando con colegas de varios sectores para tratar de cuantificarla y saber en qué momento nos encontramos y qué tenemos que hacer para elevarla”.

Asimismo, están inmersos en el estudio de los mercados pues, a juicio del investigador, se debe conocer bien los gustos, preferencias y hábitos de los potenciales clientes en aras de que el producto que se presente resulte atractivo.

Esto es fundamental, tanto de los países, como dentro estos, por regiones, especificó.

En cuanto a temas tecnológicos, refirió que la informatización no es solo tener servicio de Wi-fi en toda la instalación hotelera, sino que los clientes sean capaces, a través de esas plataformas, de conocer, informarse y orientarse, y esta es una dirección importante en la cual se están haciendo grandes esfuerzos.

Debemos ir hacia la promoción online y con un buen posicionamiento de nuestros sitios web, ya que a partir de la pandemia se ha demostrado que el número de horas que las personas dedican a navegar en Internet, a nivel global, se ha multiplicado por tres, recalcó.

Añadió que se encuentran trabajando en muchos otros programas vinculados a la recreación, la salud, el bienestar y la calidad de vida, los cuales tendrán un impacto favorable.

A decir del profesor aún falta mucho por hacer para que Cuba sea un destino totalmente innovador, pero existe un marcado interés por realizar este tipo de acciones, lo cual permitirá que en un plazo de tiempo razonable se logren resultados prometedores.

Eso sí, resumió Pomés Hernández, hay que partir de una base, y es que la innovación es un camino inexorable, ineludible y necesario.